jueves, 29 de mayo de 2014

"Que tire la primera piedra el que esté libre de pecado"

"Que atroz me resulta el mundo últimamente. Guerras, hambre, pobreza, exclusión social, violencia... Que bien viven algunas personas, mientras otras sufren lo indeseable. Injusticias, destrucción del medio ambiente, enfermedades que se ceban con lo más inocentes.. 

Que triste y penoso es vivir en un mundo así. Y hablo de nuestro siglo. Del siglo XXI. Este siglo. Un siglo donde aun siguen ocurriendo atrocidades de la mano del ser humano (eso por supuesto), como la lapidación, el machismo, el racismo.. Etc  Siglo XXI. "Hermoso" siglo, ¿Verdad? (Se nota la ironía..¿No?)

A menudo me pregunto a mi misma, si es que todo esto no es más que una pesadilla que al despertar, desaparecerá como si nada. Pero luego me despierto, y descubro que no es así. Mujeres maltratadas, explotación infantil, animales asesinados, bullyng, guerras, xenofobia... Y me pregunto si, además de escribir en este pequeño blog, podría hacer algo más por mejorar este mundo. Pero no... Yo sola no puedo. Es imposible. Tenemos que ser la parte por el todo. Cojer "al toro por los cuernos" y revelarnos. No permitir las injusticias. No permitir que nos quiten nuestros derechos. Y saber luchar por ellos.

Este es un mundo de hipocresía y de egoismo. Un mundo de interesados y de aprovechados. Un mundo donde solo se mira por uno mismo, y no por el pueblo. Cada dia me despierto pensando que algo ha cambiado, que algo empieza a ir bien. Pero luego descubro que no es así... Y me decepciono. Que triste. Nadie hace por cambiar. Todo sigue igual. Pero aun quedan buenas personas dispuestas a cambiar el mundo. Yo lo se. Aún queda esperanza. Porque la esperanza nunca muere." 

Pero basta ya de cháchara, no me voy a ir por las ramas. El tema de hoy es la lapidación llevada a cabo por el gobierno musulman como castigo a aquellos/as "infieles" que osan desobedecer los dictados del Corán.
Debido a las recientes noticias que he escuchado durante estos meses sobre dicho tema.

Pero sobretodo, para luchar y reevindicar la salvación de todos aquellos que sufren del yugo del gobierno islamista.
Hace unos meses leeí la noticia siguiente, y se me pusieron los pelos de punta.

Meriam Yahia Ibrahim Ishag, de 27 años y embarazada de ocho meses, será castigada primero con 100 latigazos por “adulterio" tras haber contraído matrimonio con un hombre cristiano.
La mujer está en prisión junto a su hijo de 20 meses y embarazada de 8 meses, después de ser arrestada en febrero pasado tras la denuncia de un familiar. La sentencia desató una fuerte conmoción en todo el mundo.

Amnistía Internacional definió la sentencia como “repugnante” y pidió la inmediata liberación de la joven. “Estamos en presencia de una fragante violación internacional de los derechos humanos”, dijo la entidad.
En los últimos días, numerosas embajadas occidentales y varias Ongs respaldaron a la mujer.

En la última audiencia, celebrada en un tribunal de la capital sudanesa, el juez Abbas Mohammed Al-Khalifa se dirigió a la imputada llamándola con el nombre árabe Adraf Al-Hadi Mohammed Abdullah y preguntó si rechazaba convertirse nuevamente al Islam.
Yo soy cristiana y no cometí apostasía” , replicó la joven.

Entonces llegó la sentencia.  “Te hemos dado tres días de tiempo para renunciar (al cristianismo), pero tu continúas negándote a volver al Islam y entonces te condenamos a muerte por ahorcamiento”, dijo el juez.
Según Amnistía Internacional, Meriam Yahia Ibrahim creció como cristiana ortodoxa, religión de su madre, ya que su padre musulmán estuvo ausente desde que era pequeña.

La mujer luego se casó con un cristiano del sur de Sudán, pero su matrimonio fue considerado nulo porque es contrario a la Sharia. Además, según la ley islámica, si el padre es musulmán, la hija automáticamente es de su misma religión.
Sudán introdujo la Sharia en 1983, pero las sanciones se limitan, casi siempre, a latigazos. Sin embargo, no es la primera vez que Jartum se encuentra en el centro de la atención internacional por sus sentencias. En el 2012 habían generado desconcierto los casos de Intisar Sharif Abdallah y de Layla Ibrahim Issa Jumul, ambas condenadas a la lapidación y luego liberadas.

Varias entidades han iniciado ya campañas para lograr la liberación de la mujer. Italians for Darfur exhortó a salvar a Meriam e inició una recolección de firmas que serán giradas al presidente sudanés, Omar al Bashir, el único que puede conceder la gracia y puede evitar esta “atroz injusticia” . La comunidad internacional no puede permitir que se cumpla una barbarie de este tipo" dijo la vicepresidente del Parlamento europeo, Roberta Angelilli.
En tanto, el diario Avvenire, de los obispos italianos, lanzó una campaña en Twiter para salvar a la joven.

Respecto al concepto de "lapidación", he de destacar que, el Corán señala la lapidación como el castigo más adecuado contra los delitos sexuales y describe como Alá destruyó al pueblo de Lot por sus prácticas homosexuales: «Flagelad a la fornicadora y al fornicador con 100 azotes cada uno. Por respeto a la ley de Alá, no uséis de mansedumbre con ellos, si es que creéis en Alá y en el Último Día. Y que un grupo de creyentes sea testigo de su castigo». Obiamente, todo esto esta prroducido por los radicalistas musulmanes.

¿Que narices nos pasa? ¿Cómo es posible que, en pleno siglo XXI sigan ocurriendo estas barbaridades, y que nadie haga nada por hacer desaparecer estas lacras?

Espero de corazón que salven a esta mujer y en general, a todos aquellos y aquellas personas que dia a dia son perseguidas por los gobiernos de esos paises. Porque como dijo una vez Jose Agustín Goytosolo, en su poema "Nadie está solo", "Cuando alguien pierde su libertad, nos la están quitando también a nosotros".
Nadie debe de vivir solo, ni tampoco cerrando los ojos ante los sufrimientos de los demás.

Pero e de decir, que no todo en esta vida es infelicidad. Tambien hay cosas buenas. Ya se que parece que soy una amargada porque mis entradas hablan de temas duros y tristes, pero solo es una parte de la realidad.

Recupero ahora un texto de mi escritora favorita, Laura Gallego García, de la novela "Dos velas para el diablo"

"[....] Pero eso no es justo. Vale, claro que pasan todas esas cosas malas, pero esa no es toda la verdad. También ocurren cosas buenas. Todos los dias. Pero tendemos a ignorarlas.
  Supongo que porque dan más morbo las cosas malas. Las imágenes de violencia. Nos hacen sentir seguros en nuestras casas y cómodos en nuestras vidas; o nos hunden en la miseria y nos reafirman en nuestra creencia de que el mundo es una mierda.[...]"


Espero que les haga reflexionar y que les guste.

Saludos..

Laura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario