martes, 22 de abril de 2014

Nelson Mandela y su lucha por la igualdad

En la entrada de hoy vuelvo a hablar de Nelson Mandela,como anteriormente. Esta vez, en cambio,aportaré una visión menos personal, pero más histórica,con información sacada de libros, revistas y también otras fuentes de información.

Mandela se entregó en una batalla sin cuartel contra la intolerancia,luchando por los derechos y la libertad de los africanos,por la igualdad entre blancos y negros.

Hay un momento clave en la biografía del líder sudafricano: su discurso ante el Tribunal Supremo de Pretoria el 20 de abril de 1964, en el que explicó las razones que le llevaron a emplear la violencia, en actos de sabotaje y sin pérdida de vidas, contra el Estado represor.
Este discurso, leido ante los jueces que le condenarian a cadena perpetua, es, además de un documento para la historia, el compendio de las ideas que le acompañarán hasta el final de sus dias.

<< He anhelado una sociedad libre y democrática >>

Madiba era un gran orador y sabía en todo momento cómo hablar desde el corazón y, ante el tribunal que iba a decidir su destino, hizo un retrato muy real de los oprimidos:

<< Cuando hay que llevar o limpiar algo, el hombre blanco siempre mira a su alrededor buscando a un africano que lo haga por él, tanto si el africano es un empleado suyo como si no. Debido a esta actitud, los blancos tienden a considerar a los africanos como una estirpe diferente. No los consideran personas con familias propias; no se dan cuenta de que tienen emociones y de que se enamoran igual que los blancos; de que quieren estar con sus mujeres y sus hijos igual que los blancos; de que quieren ganar suficiente dinero para mantener a sus familias como es debido, alimentarlas, vestirlas y enviarlas al colegio >>.

Hoy en dia podría parecer que para reevindicar algo tan básico no era necesario llegar hasta los respresentantes de la '"justicia", pero un régimen que niega los derechos a la mayoría, sólo por el color de su piel, no deja otra alternativa que la lucha. Y había que ser muy valiente para plantar cara a quienes eran capaces de asesinar a 69 personas y herir por la espalda a otras 180, porque no fué otra cosa la matanza de Sharpville, que dio un giro a la acción política de Madiba y los líderes de Congreso Nacional Africano.

Nelson Mandela concluía su discurso de defensa sin titubeos, seguro de estar cumpliendo una batalla irrenunciable: << He anhelado el ideal de una sociedad libre y democrática en la que todas las personas vivan juntas en armonía y con igualdad de oportunidades. Es un ideal por el que espero vivir y que espero lograr. Pero si es necesario, es un ideal por el que estoy dispuesto a morir >>. 
Pasará casi tres décadas de su vida encarcelado, de presidio en presidio, sufriendo un tremendo desgaste físico y psicológico que dejaría huellas imborrábles en su cuerpo y en su carácter.
Pero cuando porfín abandona la prisión, de la mano de Winnie Mandela, el 11 de febrero de 1990, su determinación de hacer realidad una Sudáfrica multirracial de paz y convivencia serían, si cabe, aún más fírmes.

"Nadie nace odiando al otro por el color de su piel, procedencia o religión. Si se aprende a odiar, también se puede enseñar y aprender a amar".

"La libertad es inútil si la gente no puede llenar de comida sus estómagos, si no puede tener refugio, si el analfabetismo y las enfermedades siguen persiguiéndoles".

Continuará..

Saludos,
Laura.

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